Tras 50 años de otros tantos gobiernos, de acontecimientos históricos que también marcaron pauta, tanto o más, que aquel 23 de enero de 1958, cuando unas fuerzas armas en conjunto con los partidos políticos (representantes del país), y como intermediarios entre estos los estudiantes del país, conjugaron la salida del dictador. Las prostestas en las celles caraqueñas, los incesantes reclamos y tomas de posición por parte de los diferentes dectores del país, llevaron a la desesperación definitiva del -para entonces presidente- Marcos Peréz Jimenez, quien no vio otra salida, sino la de tomar su avión y huir -literalmente- por la derecha.
De esta manera, se sella otro momento histórico en Venezuela, es el fin de las dictaduras militares, y el comienzo de una sociedad con miras a un sistema demócratico hasta el fin de sus días, una sociedad que había aprendido lo importante que era levantar su voz, y el voto se convirtió en la principal herramienta para eso, hacerlo respetar era otra gran importante azaña que los venezolanos creían cumplida, y la cual de ahora en adelante, se mantendría así.
Venezuela sin embargo cayó en un declibe económico y social sin presedentes, llegó el tan rememorado "viernes negro", el bolivar decayó y "mayami nuestro" se acabó, el país, estaba siendo víctima de todos los arrebatos que unos cuantos presidentes atrás -incluyendo a Perez Jimenez- venían haciendole al tesoro nacional. Pero finalmente logró superar la crisis, y continuo rememorando aquellos días en que Miami era todo nuestro, el apartamentico, los dolares, el "ta' barato dame dos", etc. Las calles se llenaban de gente que soñaba aún con esa realidad, no tan lejana.
Pero hoy más de 50 años después, Venezuela se sigue levantando ante las arbitrariedades de un gobierno, que llegando por la vía democrática hoy parece querer perpetuarse en el poder, por la vía que sea. En las calles, vemos a jovenes, niños y ancianos, levantando las voces y las manos en protestas por la realidad que vivimos día y noche, una realidad -definitivamente- bastante lejana de aquel "mayami nuestro", una realidad que se ve cada vez más desmejorada, por una crisis que se asienta y que parece no dejar paso a la buena ventura.
Realizado por: Laurin Bello y Alenairam Velandia
0 responses to "5 décadas después"